Los problemas medioambientales en el Perú
Según el ecologista Antonio Brack, cuatro son los principales problemas medioambientales que se dan en el Perú:
La erosión de los suelos
Los suelos para uso agrícola son los más escasos (7%). En la Costa un 40% de los suelos se ven afectados por la salinización y el mal drenaje. A esto debe agregarse los efectos del fenómeno de El Niño. En la sierra el principal problema es la erosión, que afecta a más del 60% de los suelos agropecuarios. En la Amazonía, un 60% de las tierras ocupadas y colonizadas están en abandono, debido a la pérdida de fertilidad por la erosión y el empleo de técnicas inadecuadas.
La calidad del agua
Sus causas principales son la contaminación industrial, la falta de tratamientos de las aguas servidas que van directamente al mar o a los rios, y el uso indiscriminado de agroquímicos. La contaminación industrial más significativa es la que proviene de la minería, la industria pesquera y el sector de hidrocarburos.
La disposición de basuras sólidas y peligrosas
En el país se generan aproximadamente 5624 toneladas de basura por día, de las que más de la mitad corresponden a la capital. La mayor parte de las ciudades no cuenta con rellenos sanitarios adecuados y los desechos se vierten en lugares inadecuados.
Calidad del aire
Este tipo de problemas está concentrado en las grandes ciudades. Una causa importante es el incremento del parque automotor y su mal estado, así como el empleo de gasolina de baja calidad. Otras fuentes de contaminación aérea son la actividad minera e industrial, la quema de basura y residuos en el campo.
Enfoques 5. 2da edición 2005
Ciudadanía Ambiental
La ciudadanía ambiental es la integración dinámica entre el reconocimiento de los derechos al ambiente y a la vida, los deberes diferenciados de ciudadanos y ciudadanas frente al ambiente y el desarrollo sustentable, y la participación activa de todos y todas para defender sus derechos y ejercitar cotidianamente sus respectivas responsabilidades, en un marco ético y de valoración de la vida en todas sus manifestaciones.
En otras palabras, podemos decir que necesitamos educarnos para ser:
• Ciudadanos y Ciudadanas Ambientales con un sustento ético y un conjunto de valores que permitan la construcción de nuevos seres humanos, propiciando la relación armónica entre la sociedad y la naturaleza, en la perspectiva del desarrollo sustentable.
• Ciudadanos y Ciudadanas Ambientales críticos y conscientes, que comprendan, se interesen, reclamen, y exijan sus derechos ambientales estando a la vez dispuestos a ejercer sus propias responsabilidades ambientales
• Ciudadanos y Ciudadanas Ambientales capaces de organizarse y participar en la dirección de su propia vida, adquiriendo también poder político comunitario, local, regional, nacional, junto con una gran capacidad de cambio colectivo.
• Ciudadanos y Ciudadanas Ambientales comprometidos con un cambio profundo de mentalidad, de conceptos y de valores respecto del ambiente.
• Ciudadanos y Ciudadanas Ambientales con capacidad de vigilancia y participación en la aplicación de las políticas públicas y con proyectos propios para lograr un manejo de recursos naturales con una racionalidad social equitativa y un entorno más habitable.
TODOS Y TODAS podemos y debemos ser ciudadanos y ciudadanas ambientales desde nuestra vinculación como seres vivos en el Planeta, no depende de la edad ni de la condición socioeconómica, ni de la cultura a la que pertenezcamos, ni del género, ni de nuestras creencias o ideologías. Todos y todas hemos nacido de esta Madre Tierra.
Eloísa Trelles Solís
Según el ecologista Antonio Brack, cuatro son los principales problemas medioambientales que se dan en el Perú:
La erosión de los suelos
Los suelos para uso agrícola son los más escasos (7%). En la Costa un 40% de los suelos se ven afectados por la salinización y el mal drenaje. A esto debe agregarse los efectos del fenómeno de El Niño. En la sierra el principal problema es la erosión, que afecta a más del 60% de los suelos agropecuarios. En la Amazonía, un 60% de las tierras ocupadas y colonizadas están en abandono, debido a la pérdida de fertilidad por la erosión y el empleo de técnicas inadecuadas.
La calidad del agua
Sus causas principales son la contaminación industrial, la falta de tratamientos de las aguas servidas que van directamente al mar o a los rios, y el uso indiscriminado de agroquímicos. La contaminación industrial más significativa es la que proviene de la minería, la industria pesquera y el sector de hidrocarburos.
La disposición de basuras sólidas y peligrosas
En el país se generan aproximadamente 5624 toneladas de basura por día, de las que más de la mitad corresponden a la capital. La mayor parte de las ciudades no cuenta con rellenos sanitarios adecuados y los desechos se vierten en lugares inadecuados.
Calidad del aire
Este tipo de problemas está concentrado en las grandes ciudades. Una causa importante es el incremento del parque automotor y su mal estado, así como el empleo de gasolina de baja calidad. Otras fuentes de contaminación aérea son la actividad minera e industrial, la quema de basura y residuos en el campo.
Enfoques 5. 2da edición 2005
Ciudadanía Ambiental
La ciudadanía ambiental es la integración dinámica entre el reconocimiento de los derechos al ambiente y a la vida, los deberes diferenciados de ciudadanos y ciudadanas frente al ambiente y el desarrollo sustentable, y la participación activa de todos y todas para defender sus derechos y ejercitar cotidianamente sus respectivas responsabilidades, en un marco ético y de valoración de la vida en todas sus manifestaciones.
En otras palabras, podemos decir que necesitamos educarnos para ser:
• Ciudadanos y Ciudadanas Ambientales con un sustento ético y un conjunto de valores que permitan la construcción de nuevos seres humanos, propiciando la relación armónica entre la sociedad y la naturaleza, en la perspectiva del desarrollo sustentable.
• Ciudadanos y Ciudadanas Ambientales críticos y conscientes, que comprendan, se interesen, reclamen, y exijan sus derechos ambientales estando a la vez dispuestos a ejercer sus propias responsabilidades ambientales
• Ciudadanos y Ciudadanas Ambientales capaces de organizarse y participar en la dirección de su propia vida, adquiriendo también poder político comunitario, local, regional, nacional, junto con una gran capacidad de cambio colectivo.
• Ciudadanos y Ciudadanas Ambientales comprometidos con un cambio profundo de mentalidad, de conceptos y de valores respecto del ambiente.
• Ciudadanos y Ciudadanas Ambientales con capacidad de vigilancia y participación en la aplicación de las políticas públicas y con proyectos propios para lograr un manejo de recursos naturales con una racionalidad social equitativa y un entorno más habitable.
TODOS Y TODAS podemos y debemos ser ciudadanos y ciudadanas ambientales desde nuestra vinculación como seres vivos en el Planeta, no depende de la edad ni de la condición socioeconómica, ni de la cultura a la que pertenezcamos, ni del género, ni de nuestras creencias o ideologías. Todos y todas hemos nacido de esta Madre Tierra.
Eloísa Trelles Solís