Tal como la mayoría de los politólogos, entiendo que no hay una teoría unitaria de democracia y que la misma está en disputa. También comprendo como válida la afirmación de que la vida en sociedad a través del ejercicio de la libertad de expresión, de reunión, de organización y de manifestación son los requisitos básicos para una sociedad democrática. Aunque esenciales, estos derechos no son fines en sí mismos. Y la garantía de la estabilidad de estos derechos no puede existir excluyendo la dimensión social, distributiva, jurídica y económica de la “democracia” capitalista en que vivimos. Así, no comprendo como “democrática” una sociedad plena de derechos formales, pero donde las mayorías no influyen de forma directa sobre y acerca de las decisiones fundamentales. O sea, el capitalismo como tal, es todo menos democrático.
Bruno Lima Rocha
En los actuales regímenes, el poder no es ejercido por el conjunto del pueblo, sino por unos pocos (y no se quiere decir aquí que sólo unos pocos, pertenecientes a la minoritaria clase burguesa, tengan el derecho de ejercer el poder, sino que realmente son unos pocos los que ejercen el poder político). El ejercicio del poder por parte de una minoría es lo que define al régimen oligárquico (el término griego "oligarquía" significa el "gobierno de unos pocos"). La universalidad del sufragio en las modernas oligarquías no cambia para nada su carácter oligárquico, puesto que el poder sigue siendo ejercido por una minoría de "elegidos" (y... la elección es un procedimiento propio de la oligarquía).
Alfredo Torrado
Una crítica socialista que ha existido desde sus orígenes hacia los demócratas, es que a éstos sólo les importa la igualdad del hombre en los planos legales e institucionales, mientras que para ellos dicha igualdad también debía considerarse en terrenos sociales y económicos.